Si de algo nos tenemos que sentir orgullosos los tablistas peruanos, aparte de nuestros surfers y nuestras olas, es de BOZ. Una marca que ha trascendido por más de 5 generaciones y sigue estando a la vanguardia, dejando el nombre del Perú en alto. Este año la marca cumplió 50 años desde su lanzamiento en el 72 y decidimos hacerle una profunda entrevista al Cholo. Los que lo conocen sabrán que Ricardo no es de muchas palabras, pero con ayuda de su hija, Camila, logramos sacar unas anécdotas y datos históricos que no se querrán perder… A continuación les dejamos la entrevista del Cholo Bouroncle y los 50 años de Boz.
¿Cómo decidiste fundar BOZ? ¿Qué hacía el Cholo en ese entonces?
Decidí hacer una compañía que fabricara wetsuits porque no existía nada en el Perú y era muy difícil conseguirlos. Yo estaba terminando mi bachiller de ingeniería industrial en la UNI, ya había participado en tres mundiales de tabla en la categoría open y me sentía listo para comenzar mi emprendimiento relacionado con mi pasión, el surf. El único que me apoyó en ese entonces fue mi abuelo y no pude dormir tranquilo hasta devolverle la plata que me había prestado para comenzar.
¿Cómo era estar en la industria del surf en ese entonces, competidores, tecnología, gobiernos y estereotipos?
En los años 70’s estábamos en un gobierno militar de izquierda entonces no existían marcas importadas, y nacionales en la industria del surf sólo habían unos pocos fabricantes de tablas, muy pequeños y artesanales, nada más. La tecnología era nula en Perú y muy básica en el mundo. En ese entonces no existía el surf como profesión y lo practicábamos unos pocos.
¿Cómo han evolucionado los trajes en estos 50 años? (línea del tiempo en temas de tecnología, materiales, diseños)
La evolución ha sido radical para Wetsuits BOZ, desde los neoprenos que eran hechos de jebe básico, mucho más duro, con los que se hacían trajes de dos piezas, overol y casaca para correr tabla. Actualmente los materiales son eco amigables con tecnología de vanguardia, se sienten como un guante, tienen cortes ergonómicos con el menor número de piezas y llevan felpas térmicas internas que te dan abrigo adicional en el agua.
Recuerdo que empezamos Boz con 30 planchas de neopreno, una lata de goma, una tijera y una máquina de costura. Muy emocionado, confeccioné mi primer traje y lo llevé a un amigo para que lo pruebe en el agua. Antes de que mi amigo entrara al mar, cuando se lo estaba poniendo, se rompió una manga (parece chiste, es anécdota jaja) y al día siguiente empecé a hacer todo de nuevo, cada vez mejor, hasta llegar a ser lo que somos hoy.
Durante todas estas décadas muchas marcas han aparecido y se han ido. ¿Cuál ha sido el secreto de BOZ para mantenerse vigente? ¿Qué retos y desafíos han actualizado?
Los retos y desafíos para Wetsuits BOZ en estos 50 años han sido constantes, mayores aún tomando en cuenta los diferentes gobiernos que hemos ido atravesando en Perú, como los de izquierda, la época del terrorismo y la súper inflación, pero esto forma parte de ser un empresario peruano que inició en el 72.
En la época de los 90’s, cuando el país tenía la súper inflación, la plata que tenías hoy no valía nada al día siguiente, entonces teníamos que cambiar los precios de los trajes todos los días. En ese entonces tampoco existían las tarjetas de crédito, y como el dinero era muy volátil, tampoco se podía pagar por partes, así que lograr una venta era mucho más difícil que hoy en día, por ende mantener a flote la empresa también, porque con las ventas es que se paga todo, el local, personal, materia prima, etc. A pesar de todo esto, para sobrevivir y destacarnos de la competencia, nunca bajamos nuestra calidad, ofrecíamos garantía y servicios de reparaciones.
Sabemos que BOZ ha influenciado la industria de wetsuits en el mundo, ¿nos puedes contar un poco más de esto?
Sí, fuimos los primeros en crear un wetsuit sin costuras en el panel de remada, que potenciaba la movilidad del tablista, y ayudamos al mejor fabricante de neopreno a que desarrollen un material más elástico para poder implementarlo en nuestros trajes.
Hemos visto también que gracias a la globalización la mayoría de marcas han migrado su producción a Asia. ¿Por qué BOZ continúa apostando por el trabajo local y artesanal?¿Qué ventajas trae esto?
Nosotros continuamos produciendo local y artesanalmente nuestros wetsuits para tener la mejor confección y acabado del mercado. Además esto nos permite personalizar los wetsuits y así ofrecer la mayor variedad de productos. No confiamos en la producción masiva porque no cuidan tanto la calidad. Por más que la producción masiva bajaría notablemente los costos, nosotros preferimos elegir la excelencia de los trajes para mayor satisfacción de nuestros clientes.
Hace algunos años crearon la marca Beach Please, ¿qué nos pueden contar de este proyecto?
Esta marca la crearon mi esposa Milagros y mi hija Camila en el 2015 para darle a las chicas wetsuits únicos que combinen diseño con funcionalidad. Debo admitir que al principio fui un poco reacio a la idea, para mi lo único importante era lo funcional, pero con gusto acepto que me equivoqué. En esta marca sacan colecciones limitadas todos los años con prints originales y además ellas se enfocan mucho en la parte ecofriendly de los materiales que hemos adoptado también para Wetsuits BOZ.
¿Cuáles son los próximos objetivos de BOZ y cómo se ven de acá a 10 años?
Nuestro objetivo es seguir innovando en modelos simples pero funcionales con la mejor calidad del mercado y viendo la continuidad de la marca en una siguiente generación.
Alguna anécdota que te gustaría compartir o algún momento que te haya traído mucha satisfacción en este camino que nos puedas contar.
Hace 20 años atrás, la Surfer Magazine tenía una edición especial que sacaban una vez al año en donde tenían una sección dedicada a la tecnología de los wetsuits de las marcas en el mundo y pusieron a Wetsuits BOZ en grande como ejemplo y a todas las otras marcas conocidas de surf aparte, eso nos llenó de orgullo y fue un reconocimiento mundial a nuestro trabajo y dedicación.
Otro momento que nos llenó de orgullo fue que dimos el ejemplo a las demás marcas existentes para cambiar el diseño de las piezas de la remada de los wetsuits, lo demás es historia.
Y es verdad… lo demás es historia y es para sentirnos orgullosos de lo que tenemos. Espero les haya vacilado la historia del Cholo Bouroncle y los 50 años de BOZ. Que viva el surfing peruano, que sigan tengan buen fin de semana y ALAWAAA!