Los que me conocen saben que amo competir… me gusta esa adrenalina y esa presión al estar en el agua con la gente viendo y esperando algo de ti. Me gusta dar un buen show y hacer que la gente disfrute de mi deporte, amo representar a mi país y obviamente… me gusta estar parado arriba del podio.

Para esto es necesario meterle harta disciplina, comer bien, entrenar más que nadie y hacer demasiados sacrificios… cosas que hago desde que decidí dedicarme a este deporte profesionalmente cuando tenía 15 años (hace 10 años)… en ese momento era un enfermo por el surf, tranquilamente me tiraba entre 5 y 8 horas en el agua los veranos y en el invierno cada momento libre que tenía me lo pasaba corriendo, viendo videos de surf o leyendo las revistas de la SURFER o la Surfing Mag a las que estaba suscrito.

Mis amigos me llamaban “loquito surf”, cuando llegaba al cole mis patas me gritaban “Yew” y mi mamá luchaba por quitarme el “broder” o mi forma lenta de hablar jajaja… Con el tiempo el surf se convirtió en un trabajo para mi, “la mejor oficina” decía yo… pero cada vez habían mayores responsabilidades… debía conseguir auspicios para poder viajar, tenía que firmar una ficha todos los días con mi asistencia tal cuál oficina con foto check, volverme “influencer” para ser atractivo para las marcas y pensar en cómo hacer para que mi deporte sea algo rentable y me permita tener el estilo de vida al cual aspiro.
Poco a poco ese espíritu surfer, las ganas de estar en el agua todo el día y el “stoke” fueron disminuyendo. Mi mente se centraba solo en los objetivos y en entrenar en olas malas para la siguiente competencia. A eso se le sumó que cambió el criterio del Longboard y ahora exigían que sea 100% clásico, cambio con el cual estoy de acuerdo, pero lamentablemente en Lima tenemos muy pocas olas idóneas para ese estilo de surf y créanme, no es tan divertido correr con un log 9.6 de una sola quilla en Punta Rocas de 3 metros jajaja. Vendí mi longboards performance y pasé a tener tablas Steward, Black Rose o Takayama … esas tablas me obligaron a en vez de buscar las mejores olas, a estar corriendo cachinas y olas misias para poder sacarles provecho.
Viajaba a unos países alucinantes para llegar 2 días antes del evento, entrenar, competir y regresarme lo antes posible a casa… sin conocer, disfrutar con los amigos o buscar otras olas, literal un viaje de chamba.
Todo esto fue apagando esa llama que tenía por el surf dentro de mi y dejé de disfrutar lo que hacía… Hasta que un día viendo a mis patas vacilando en el norte con unos tubazos y al Inka Team gozando en HAWAII mientras yo corría Barranquito malaso, me dije a mi mismo ¿Qué pasó Lucas? ¿Qué pasó con ese “loquito surf”? ¿Dónde quedó el stoke y por qué fue que en verdad decidiste dedicarte a esto?
Empecé porque quería correr buenas olas toda mi vida, me encantaba conocer nuevos amigos, descubrir el mundo con mi deporte y empujar mis límites más allá…
Ese día hice un cambio en mi, me desahuevé y me propuse volver a disfrutar del surf, el objetivo sigue siendo el mismo… quiero ser el número 1 del mundo, pero no si eso me impide disfrutar del proceso y de este increíble deporte que se convirtió en mi vida.
Hace 6 días estaba terminando de trabajar unos temas de Surf Place, eran las 3 am y aún me faltaba un poco para terminar… me preparé un café y mientras estaba pasando, abrí Surfline en el teléfono… la norte iba a entrar, se veía sólida y era muy probable que la gente de Lima no se mandara de nuevo a ir, o sea pintaba como un ganadón. Mandé unos correos para re programar unas reuniones importantes y me compré el pasaje a Talara sin pensarla, no tenía ni comitiva ni sitio pensado para quedarme, pero sabía que iba a ser un viajesazo.
La noche antes del viaje no pude dormir… habían pasado 2 años desde que hice mi último surf trip por vacilón y la emoción no me dejaba cerrar los ojos, aún no me había ganado o metido algún tubazo, pero eso no importaba, el “Stoke” estaba de vuelta… esa ilusión que tenía de Niño había regresado y decidí contarles mi experiencia para que nunca dejen de disfrutar de esta increíble deporte y no pierdan ese espíritu surfer que llevan dentro. Efectivamente el viaje fue increíble… se armó un comitivon, conocí nuevos amigos y me metí un par de tubazos… pero esa será una historia para una próxima oportunidad.

Como dice una de las grandes marcas de surf “Only a surfer knows the feeling” y les digo por experiencia que si ya lo conocen… nunca lo dejen ir.

-
XCEL COMP 4/3MM Niño$266.40
-
Comp X S/S Fullsuit 2mm$315.53
-
Infiniti 5-Finger Glove 1.5mm$70.00
-
XCEL AXIS S/S SPRING 2MM BOYS$105.00
-
XCEL MUJER AXIS S/S SPRING 2MM$136.00
-
XCEL COMP 4/3MM$316.00
-
XCEL COMP 3/2MM$290.00
-
LICRA M/C XCEL VENTX SOLID S/S$53.00
-
Surf Trucker Hat$45.00
-
Mid Spring Girls Bahia LS 2/2mm$134.00
-
Full Boys Reactor 2 3/2mm$134.00
-
Full Boys Reactor 2 3/2mm$134.00
-
Full Boys Hyperfreak 2/2mm$280.00
-
Spring Boys Reactor 2 2/2mm$94.00
-
Spring Boys Defender 2/2mm$166.00
-
Jacket Boys Hyperfreak LS 1.5mm$112.00
-
Reactor II 2mm Spring Suit Wetsuit$123.00
-
Bahia 2mm Long Arm Mid Spring Suit$160.00
-
Bahia 2mm Long Sleeve Long Spring Suit$160.00
-
Bahia 2mm Long Sleeve Cheeky Spring Suit$160.00
-
Hyperfreak FZ LS Spring Suit 2mm$214.00
-
Hyperfreak Fire 3/2+mm Chest Zip-24$480.00
-
Licra Psycho Hooded$72.00
-
Spring Reactor 2 3/2mm$147.00
-
Spring Reactor 2 2/2mm$120.00
-
Ziperless Short Jhon Original 2/2mm$187.00
-
Spring Defender LS 2/2mm$293.00
-
Spring Defender 2/2mm$267.00
-
BOYS TODDLER REACTOR BZ SS SPRING 2MM$75.00
-
Jacket Defender LS 2/2m$152.00
-
GIRLS TODDLER REACTOR BZ SS SPRING 2MM$75.00
-
Reactor Reef 2mm$40.00
-
Boys Reactor Reef Boot 2mm$32.00
-
Jacket Defender LS 2/2mm$152.00
-
Full Hyperfreak 2/2mm$333.00
-
Spring Hyperfreak LS 2/2mm$307.00