Por Pamela Álvarez Calderón B.
Esta vez no tuve que pedir vacaciones, tomar uno o más aviones, viajar varias horas, alquilar un auto y manejar otro rato. No, esta vez solo manejé por 8 minutos, de Barranco a la Costa Verde y llegué al campeonato que iba a ver ese día. Qué fácil fue!
El sábado pasado no iba a ver a los Pro del CT en algún lugar lejano del mundo. Esta vez iba a la playa Redondo a ver a los chicos peruanos competir en la 2da. fecha del Semillero Olas Perú. Y vaya que me llevé más de una sorpresa!!!
Llegamos a las 7am, no saben el frío que hacía a esa hora. En realidad no solo a esa hora, todo el día literalmente, estuvo muy pero muy frío. Estaba recontra nublado, además. Sin embargo se sentía harto calor humano. Ver a los chicos más chicos, a los medianos y a los más grandes calentando, poniéndose sus wetsuits; a los papás con ellos, apoyándolos, fue algo que realmente “calentaba” esa mañana helada. Y ni qué decir de los coach que hablaban con sus surfers, dándoles los últimos tips y consejos antes de entrar al agua. Había llegado el día de la competencia y ese día todo se decide en el agua.
Como siempre que escribo, les voy a hacer una confesión. Sinceramente, iba sin grandes expectativas, con la idea de acompañar a Jose, mi novio, que quería ver correr a 2 de sus riders en el campeonato. Jose, auspicia a 2 surfers que competían ese día, con su marca Joso Surfboards. Entonces, pensé en estar un rato, tomar algunas fotos y ya. Pero no saben…. me quedé todo el día, cual evento del CT, hasta ver el último heat y la última premiación porque estuvo mostro!!!!
Parecerá sonsaso, pero reconozco también que por ratos me sentía en Jeffrey´s Bay. No por la calidad de las olas, que estuvieron ahí, digamos que aceptables, sino por el frío que hacía. En serio, ese sábado 25 de setiembre, debe haber sido el más frío del año, al menos para mí. Y si en JBay, me compraba un té hirviendo para calentar mis manos, acá el café de 2 soles de la señora del kiosko, hacía lo mismo. Café buenazo, además.
La primera sorpresa me la llevé en el primer heat del día. Categoría sub 14. En el agua, un surfer hacía maniobras con una solidez que me sorprendió para su edad. Era Matías Flores. En serio pensé: “ese chico corre muy bien”. Así que disparé varias fotos para tratar de captar lo mejor posible esos movimientos que tenía frente a mis ojos. Y adivinen qué? Matías era uno de los riders de Joso Surfboards.
Jose ya me había hablado de él, pero yo soy mujer de poco fe jajaja, así que hasta no verlo en vivo, no quise hacerme una idea o una opinión sobre su surfing. A veces me han dicho que soy demasiado exigente con mis opiniones y que no puedo esperar ver estilos o formas de surfing como las que nos ofrecen los Pro en todos lados. Y en mi defensa digo que obvio, no espero eso, pero creo que sí tengo una visión realista. Y realistamente, Matías me dejó impactada en ese primer heat, en el que pasó en primer lugar.
A lo largo de esa mañana, vi a muchos chicos y chicas, de las diferentes categorías, corriendo increíble, enfrentándose a un mar complicado, donde por ratos solo traía espumones, pero que también te daba paredes que ellos sabían aprovechar muy bien en los 20 minutos que duraba cada heat. Poco tiempo. Hay que aprovechar las que vengan y hacerlo bien, porque no tendrán demasiadas opciones con 5 surfers más en el agua, compitiendo al lado.
Un poco más tarde, reconocí a un surfer al que había conocido a inicios del año en una playa del norte, en Tumbes. Esa mañana de enero, acompañé a Jose a correr y llevé mi cámara. Mientras tomaba fotos, mi lente empezó a seguir a este chico que la estaba rompiendo. Y cuando salió del mar, hablamos y coordinamos para mandarle las fotos que había tomado. Era Mariano Maugere. Y Mariano estaba esa mañana en Redondo, con Gabriel Aramburú. Y cuando entró al agua, mi lente no pudo dejar de seguirlo, de nuevo. No solo lo vi corriendo mejor sino que alaaaa, qué tales líneas las que dibujaba Mariano en el agua, fluido como él solo y con un estilo pajasa! De esos estilos que tanto se extrañan. Estilazo cual Joel Parkinson. Un placer verte correr, Mariano.
Lo tercero que me sorprendió fue uno de los papás. Es locaso ver a los papás apoyando a sus hijos. Obviamente reman cada ola con ellos y celebran como si ellos estuvieran en el agua. Y también sufren, si no les va bien. Pero este papá me llamó la atención de un modo diferente. Llevó su silla de playa y estuvo todo el tiempo apoyando a su hijo, gritando por él y celebrando desde la orilla de piedras de Redondo. Y no era para menos. Había por qué celebrar. Al comienzo no sabía cuál era su hijo, pero luego me di cuenta. Era Gabriel Ljubicic. Y “Ljubi”, como escuché que le dicen, es otro surfer que me recontra llamó la atención. Qué tal roller backside que tiene. Me hizo acordar a Lucca Messinas.
La final que nos regalaron los chicos de la sub 16 fue de lujo. Y esos minutos finales entre Mariano y Gabriel fueron recontra emocionantes. Era el último heat de la tarde y Gabriel y Mariano nos estaban regalando el mega espectáculo. Recontra súper archi reñido. Estaba primero Gabriel, luego agarra una ola Mariano con la que sale hasta la orilla, pero Gabriel estaba en la ola de atrás y….. sonido de chicharra, era el fin del heat. Asuuuuu. Ese final fue una locura. Con el heat finalizado estábamos tal cual evento del CT en “Waiting for scores” jajaja, solo faltaba la pantalla para ver en tiempo real cómo puntuaba cada juez. Con la sumatoria de la última ola de Mariano, pasa al primer lugar, pero cuando entra el puntaje de la última de Gabriel, lo pasa. Finalmente Gabriel primero y Mariano segundo, y todos aplaudíamos nomás. Final de infarto y con gran calidad!
Pero vuelvo a mi primera sorpresa del día y la más grande en realidad. Matías!
Matías vive en San Bartolo pero es del norte. Tiene 13 años y la tiene clarísima. Llegó a la final, tranqui y aquí les cuento algunas cosas que me gustaron mucho de Matías como competidor:
-Sabe buscar y encontrar sus olas. Y si no hay, hasta las inventa. Lo juro. En la final sub 14, agarró una ola que no daba para nada. Estoy segura que cualquier otro surfer hubiera salido en busca de otra mejor. Matías, se la inventó. La estaba corriendo como izquierda, como la ola para ese lado no daba nada, cambió y la corrió como derecha, esperó y esperó y la ola le pagó la espera. Se volvió a formar y Matías no desaprovechó esa oportunidad cerrándola con una maniobra con la que cayó solidazo.
-Habla como competidor. No todos tenemos ese “ojo de tigre” que nos impulsa a querer ganar siempre. Algunos lo tienen pero no lo saben controlar. Creo que Matías lo tiene en la exacta medida. Cuando nos contaba las decisiones que había tomado en sus heats, por qué había elegido esta ola y no la otra, por qué arriesgó en esta y la otra la corrió más a la segura… sentía que estaba escuchando las declaraciones de alguien mucho mayor y con gran experiencia.
Matías ganó la final! Fue el campeón sub 14 de esa fecha. Y saben qué es lo más paja? Que se vaciló un montón! Se divirtió, sin presiones y logró ese súper resultado. Como debe ser!!!
Me ha alucinado ver tanto talento a tan poquita edad. Me faltan páginas para hablar de muchos otros chicos que corrieron increíble!!! Y de las chicas, obvio, que asuuuuu, son unas capas!!! Desde las más pequeñitas hasta las más grandes. Se me viene a la cabeza el nombre de Brianna y de Sofia Artieda. Ya tendré tiempo de contarles sobre ellas.
Lo importante ahora es que vacilón hay, talento hay y surfing peruano hay para rato. Vamos con todo!!!
Nos vemos el próximo jueves, chau!
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