Ola del día- Gustavo Swayne en Pico Alto

El swell más grande de lo que va del año no decepcionó. Toda la costa se prendió y hubo arta ganancia. En la capital, dos de sus más famosas playas se pusieron épicas, Toto de Romana fue uno de los que se ganó en La Herra con un double barrel que verán mas abajo y más al sur, en Punta Hermosa, el que se agarro la ola del día en Pico Alto fue Gustavo Swayne que nos cuenta sobre esa ola a continuación…

Ese día me desperté temprano, quería ver el mar porque iba a estar grande, Punta Lobos había estado gigante el día anterior. Fui a marcarlo al mirador de Pico Alto como a las 7am, ya había un par de personas, la marea estaba subiendo, parecía un poco lento y por ahí decían que estaba más chico que la tarde del día anterior. Veía que ya estaba entrando más gente y algunas motos, lo tomé con un poco más de calma y me fui a tomar desayuno. Un rato después como a las 9 fui a verlo desde el mirador Analí, estaba Cachito filmando y ya había más gente en el agua, desde ahí pude ver unas olazas, se veía más sólido, reconocí a Roger Velasco, Joaquín del Castillo y a Lucca Saldivar, en unos olones.  Se veía medio movido desde afuera, no era de esos días perfectos que el mar está planito.

Por ahí se me vino la idea de tal vez ir a probar suerte a la Herra, que no la corro hace años, lidiar con el crowd y por ahí ganarme con un tubo en la 3ra. Regresé a mi casa, estaba esperando que venga una persona a solucionar un problema del agua, me dijo que llegaba a las 8 am y terminó llegando a las 11, casi 12. Después de eso, regresé al mirador de Pico Alto a verlo una vez más. Ya había salido el sol y vi unas series solidazas, la marea ya estaba empezando a bajar, decidí entrar. Busqué partner para no entrar solo, pero no hubo respuesta, ya ni modo.

Le escribí a Yefri que estaba en el bote de Petiso con el tío Gino, me dijo “Nos quedamos todo el día”, – GO – En mi casa empecé a preparar mi equipo y mi mente, mientras ponía las quillas, enceraba mi tabla, me ponía el chaleco. Salí caminando, bajé las escaleras de Señoritas, llegué a la arena y me encontré con Joaquín Gonzales, ahí estaba mi partner. Mientras estiraba y hacía unos ejercicios de respiración, salió Piero Saenz del agua, nos dijo que salían unas y que también había viento, con fe.

Empezamos la peregrinación al Templo, el mar se veía movido, las espumas de Pico Altillo casi se juntaban con las de Pacharacas, pensé en cruzar el canal y me fui pegando para esperar el momento. Mala jugada, entró una serie más grande y me cayeron 3 espumas, no eran sólidas, pero con la tabla de pico no las puedes fondear, tuve que tirar tabla y me retrocedió unos metros. Después de eso, entré un poco más y vi que había un momento de calma, decidí cruzar, ahora si con todo. La corriente estaba fuertaza, sentía que no avanzaba y solo pensaba que por favor no entren olas, para poder llegar al otro lado invicto. Mientras tanto veía como Joaquín se alejaba tranquilo remando por la izquierda de Pico, sabia decisión. Logré cruzar, y entré al point, en el camino me crucé con la comitiva del bote, les dije más vale tarde que nunca. Ya adentro me encontré con Rafael Augusto, Mateo Jiménez y el chino chema, también había un par de brasileños haciendo tow.

Foto: Gino Bello

Traté de ubicarme siguiendo las referencias que conozco, punta de la isla, las casas de Kaia, cartel que ya no se ve entre los edificios, etc. Había una corriente fuerte que te llevaba al inside y hacia abajo, no esperé mucho y me agarré mi primera ola, era una de las chicas de ese día, se sentían los baches, estuvo buena como para calentar motores. Cuando regresaba remando entró una sólida que les cayó a los que estaban adentro, A Rafael Augusto se le rompió la pita y la tabla se quedó cerca a la rompiente, felizmente no entraron más olas y pude recoger su tabla. 


Foto: Gino Bello

Después de eso, pude agarrar un par más, medianas pero buenas. La primera ola entraba movida y las siguientes un poco más limpias. Estando otra vez adentro esperando otra ola, vimos cómo se venía un tumbazo, remamos todos para adentro, pasamos una ola con las justas, pensé que qué solo era esa, y uno de los brasileños nos gritó, ¡ahí viene! Le metí turbo hacia adentro, no llegué a pasarla limpio, tuve que saltar de la tabla antes de que reviente por completo y pasarla por abajo, no me dio de lleno, salí por atrás, no había otra ola. Con esa decidí entrar un poco más. Llegó la cuarta ola, la sentí más sólida que las anteriores, una buena pared larga, bottom, subí, bajé de nuevo y de ahí se me cerró, traté de aguantar lo más que pude la espuma atrás mío hasta que me sacó la tabla y me botó. Una buena revolcada, siempre tratando de mantener la calma y que el chaleco haga lo suyo y me lleve hacia arriba en algún momento. Salí busqué mi tabla, apoyé mis brazos, un par de bocanadas y otra espuma sólida atrás. Misma receta, pero un poco menos de oxígeno, salí de nuevo, otra más. Un par de espumones sólidos, y de ahí ya dejé de contar cuantos más. Cuando pude salir de esa zona y recuperaba el aire me di cuenta que me había retrocedido bastante, estaba casi por el canal. Momento de duda, ya salgo o me voy por otra. Ya estoy acá así que pa’ dentro. Cuando Empecé a remar otra vez hacia el point pasó la moto con unos de los que estaban haciendo tow y me preguntó si quería un aventón, claramente no la dudé y me acercó hasta el bote.

De nuevo en el point tratando de ubicarme mejor y esperar una ola como la que nos cayó encima, otra vez vi los tumbos adentro, se venía algo, marqué las referencias remé un poco para adentro, ahí estaba el pico, me volteé y empecé a remar, no llegué. Volteé de nuevo y vi otro tumbo no tan grande, lo pasé y vi un picazo, se veía más limpio que los primeros, no la pensé y empecé a remarla con todo. No llegaba, seguía remando y no entraba , le metí con más fuerza y sentí como la tabla encajó, me pareció que ya estaba un poco tarde pero ya no había vuelta atrás.  Me paré, pasé una pancita y mi tabla apuntó para abajo, por un momento sentí que estaba en el aire, en esas centésimas pensé que me iba a ir de cabeza, la tabla encajó de nuevo en la ola , se clavó un poco pero logré sacarla, llegué hasta abajo, mientras hacía el bottom miraba toda la pared que se venía encima y un espumón bien grande atrás mío , sentía la fuerza de la ola en la tabla, aguanté como pude y agarré mi riel, llegué a la parte limpia, metí un bottom subí y me metí un segundo drop.

La había librado, me senté en mi tabla, pensé en los momentos críticos de la ola, y la claimee para mí, como si hubiera metido un gol. De lejos les levanté las manos a los de bote que también hicieron lo mismo, y nos despedimos. La verdad que fue una de las mejores olas de mi vida, no soy un surfer de ola grande, pero me gusta correr Pico Alto y le agradezco mucho por esta ola y todas las demás que me ha regalado.

Su nave fue una OX modelo Chulo del cabezon Ricky modelo 9.6

Video de @misolas

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